Nunca te dormirás sin aprender algo nuevo. Eso me ocurrió en el transcurso de la visita guiada a la terraza de la basílica de Santa María del Mar. La calle que va desde la plaça de Santa Maria al carrer de Canvis Vells - que también tiene sus historia - se llama de l'Anisadeta, y tiene el honor de ser la calle más corta de Barcelona. Apenas unos 4 metros de longitud.
El nomenclátor de las calles de nuestra ciudad dice:
"Nombre que se le debe a una mesa con anís y agua fresca, establecida en el lugar en tiempos antiguos, donde los obreros del puerto tomaban l'anisadeta."
Lo curioso es que sólo tiene un portal y es el número 5. Seguramente en otros tiempos fue de más longitud.
jopé ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarNo lo sabía. Pensaba que la más corta estaba en el Raval, también con un sólo portal, pero visto estos 4 metros...no hay nada que decir.
Nunca nos acostaremos sin aprender algo nuevo, Miquel. Yo lo hago constantemente!
Eliminar¡Un abrazo!
No sabia. Sabia el mes estret pero no el mes curt
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